(Nathanael Pérez Neró) SANTO DOMINGO. Ya sea por un bono de siete dígitos o por aquellos que no cuenta para el umbral gravado (menor a US$10 mil) cuando un equipo de las Grandes Ligas firma un prospecto lo hace luego de un riguroso proceso de depuración entre miles de candidatos que pocos superan. El club tiene cinco años para desarrollar ese talento antes de arriesgarse a perderlo.
Pero una vez en el sistema la trituradora es tan agresiva que la cifra de los que superan sigue siendo escandalosamente baja.
En 2012, 373 criollos de entre 16 y 22 años debutaron como profesionales en la Liga de Verano local o Dominican Summer League (DSL), el primer peldaño de la larga escalera que es el sistema de la MLB. De ese grupo hubo 184 jugadores (el 49%) que no “viajaron”, es decir, que ni siquiera superaron el primer corte antes de ser despedidos y solo 63 siguen activos en el béisbol organizado, el 17%.
El dato se desprende de una investigación realizada por DL con datos de la enciclopedia virtual Baseball-reference.com, que conllevó revisar el historial de los 943 jugadores dominicanos que vieron acción en los 35 equipos de la DSL hace ya un lustro (2012-2016) y su evolución hasta la fecha.
De esos 189 peloteros (el 51,5%) que superaron el primer cedazo hubo 68 que fueron descartados en la división más baja en los Estados Unidos, la rookie o novatos para reducirse el pelotón a 121. Otros 21 se quedaron en Clase A débil o temporada corta (short season) y el listado bajó a 100. En Clase A fuerte fueron despedidos 62 para reducir el grupo a 38, hasta AA llegaron 24, mientras que para ser promovido a AAA se redujo a 14.
De esos 14 solo seis han alcanzado las Grandes Ligas, es decir, el 1,6% del batallón que comenzó en 2012, lleno de sueños no solo ellos sino sus familiares y amigos. Son ellos; Luis Severino, Reynaldo López, Miguel Castro, Manuel Margot, Miguel Díaz y Rafael Bautista, de los cuales cuatro están activos.
Margot, que recibió un bono de US$800 mil de los Medias Rojas en 2011, pasó a los Padres en 2015, mientras que Severino, que logró US$225 mil en 2012, es lanzador de rotación con los Yanquis. Díaz (Padres) y Bautista (Nacionales) están a la fecha en rosters de 25, López en las ligas menores de los White Sox, mientras que Castro no tiene trabajo.
De uno a cuatro
Con el infielder Ramón Rodríguez los Mets tuvieron paciencia y lo mantuvieron cuatro años en su academia de Jubey, en Boca Chica. Pero los Astros no fueron tan cándidos con el jardinero Edward Santana, a quien firmaron con 17 años y su vida como pelotero profesional se redujo a dos partidos y ni siquiera agotó un turno al bate antes de ser despedido. Tampoco Toronto la tuvo con Wilfredo Bobonagua, a quien solo le dio 1.1 entradas de trabajo para prescindir de sus servicios a los 18 años.
Tras concluir la primera temporada en 2012 los equipos dieron releases a 44 de los 373 jugadores (11,7%), luego de la segunda en 2013 el corte fue de 71 (19%), después de la tercera en 2014 los despedidos fueron 64 (17%), entre ellos Hersin Martínez, a quien los Marineros dieron un bono de US$1,1 millones en 2011, pero que no superó la categoría rookie. Al final de 2015 los “cortados” fueron 65 (17,4%).
“Muchos jugadores se firman uno consciente de que no tienen todo el talento, nos sirven para ayudar a desarrollar a los que pensamos que sí. En muchos casos se da todo lo contrario, el que tenía menos crece más”, dice un veterano escucha que pide la omisión de su nombre.
Si bien en 2012 debutaron 373 entre ese año y 2016 los equipos firmaron a otros 2,308 prospectos dominicanos, lo que creó la necesidad de abrir espacio para los nuevos talentos.
De 16 a 22
Del grupo de prospectos evaluados habían seis con 16 años, pero el grupo mayor tenía 17. Fueron 121, el grueso de los “Julio 2” de 2011.
Entre ellos figura Luis Enrique Acosta, a quien los Cachorros dieron un bono de US$1,1 millones. Su desarrollo se estancó, jugó tres temporadas en el país (bateó .171) y en 2015 fue detenido por la Policía involucrado en la banda que asesinó al viceministro de Energía y Minas, Victoriano Santos y su hijo del mismo nombre, en 2015.
También jugaron 117 prospectos que debutaron con 18 años, 84 con 19 (entre ellos Rafael Bautista), 29 tenían 20 años, nueve debutaron con 21 y seis con 22. NPerez@diariolibre.com
La clase que no jugó verano
En 2011 los Rangers dieron US$5 millones a Nomar Mazara, US$3,5 mm a Ronald Guzmán, los Reales pagaron US$3 millones por Elier Hernández y US$2 mm por Adalberto Mondesí. También, Toronto pagó US$1,3 mm por Dawel Lugo y Cleveland US$1,1 mm por Dorsys Paulino. Como ocurre a menudo con este tipo de jugador de alta inversión ninguno jugó en la DSL y disputó su primera temporada en los Estados Unidos en 2012.
Artículo original de: diariolibre.com